Capítulo 17. Segunda Parte.

Alba pide a sus amigas que le traigan el ordenador portátil a la cama. Tras contarle todo lo ocurrido, y después de que Ariela confesase la relación entre María Isabella y Enrique, ante la aparente indiferencia de Alba, todas marchan a dormir.

Antes de hacerlo ella, Alba envía un nuevo email:

“He estado a punto de conseguirlo. Había conseguido una plaza en un espectáculo en Arabia Saudí, pero una compañera me ha lesionado adrede y tengo que estar tres semanas en reposo. Trataré de recuperarme lo antes posible.

P.D. Vendrá el fisio de la compañía a casa a hacer la rehabilitación. Lo relacionan con la desaparición de Paola. Espero órdenes.

Un saludo, Alba Marín.”

A penas han pasado un par de minutos cuando Alba recibe la respuesta.

“Un lamentable acontecimiento, todo deberá posponerse entonces. Con respecto a Enrique, acércate a él todo lo posible. Así será más fácil obtener información acerca de los próximos posibles traslados.”

Comisaría de Policía Nacional. Murcia, España.

-          Y por eso te acercaste a él… - Dice el inspector mientras pasa folios escritos dentro de una carpeta que no me deja ver.

-          Sí. – contesto levantando la mirada e intentando llegar con ella a alguna palabra escrita en alguno de esos folios.- Quizá entendí mal el mensaje.

-          Totalmente. – Dice mientras cierra la carpeta entre sus manos. -De ahí no puede extraerse que él fuese sospechoso.

-          No…

-           Dudaste de él, - Ahora es él quien me interrumpe.- ¿No es cierto?

-           Sí, lo hice. Creí que tenía algo que ver con las desapariciones.

-           ¿Por qué cambiaste de idea?

-           Porque lo conocí.